Ana Neville, esposa de Ricardo III, rey de Inglaterra

 

    Anne Neville nació el 11 de junio de 1456 en el castillo de Middleham. Era la menor de las dos hijas que tuvo el matrimonio de Ricardo Neville, conde de Warwick y Anne de Beauchamp, condesa de Warwick. Anne junto a su hermana Isabel eran las únicas herederas de las riquezas de su familia, al no haber hijos varones; crecieron cerca de Jorge y Ricardo, dos de los hijos de Ricardo de York y Cecilia Neville, tía de su padre.

    Tanto el conde de Warwick, como sus dos hijas tuvieron roles importantes en la Guerra de las Dos Rosas. Al estar Warwick relacionado con los York, les apoyó cuando Ricardo de York decidió aspirar al trono, por ser descendiente de Ricardo II, que había sido asesinado por los Lancaster, para ser reemplazado por Enrique IV. En 1460, en el trascurso de la batalla de Wakefield, los Lancaster derrotaron a los York, dando muerte a Ricardo de York, a su hijo Edmundo y al padre de Warwick, el conde de Salisbury. El hijo de Ricardo, Eduardo, heredó el título de duque de York, siendo coronado rey en 1461, bajo el nombre de Enrique IV. Warwick se convirtió en el terrateniente más poderoso de Inglaterra. Enrique IV se casó con Isabel Woodville en 1464, lo que disgustó, grandemente, a Warwick, que había planeado un matrimonio más ventajoso para él. Desde entonces, la relación entre ambos comenzó a deteriorarse, y Warwick cambió de bando, decidido a luchar contra Eduardo y los York para conseguir el regreso de Enrique VI, con el liderazgo de la reina Margarita de Anjou, deseosa de recuperar a su esposo y que su hijo heredara el trono.

    Warwick hizo una alianza con Margarita de Anjou, y deseoso de demostrarle que era digno de su confianza, tras haber apoyado a los York, casó a su hija Anne, en 1470, con Eduardo de Westminster, príncipe de Gales. La boda se celebró en Bayeux (Francia), y Anne se convirtió en princesa de Gales. Fruto de esta alianza fue el regreso de Margarita de Anjou, junto a Warwick y sus aliados, a Londres, reconquistando la ciudad y haciendo huir a Enrique IV.

    El matrimonio de Anne con Eduardo de Westminster hizo que Clarence se convenciera de que Warwick no tenía ninguna intención de apoyarlo en sus aspiraciones al trono, por lo que regreso al bando de los York, apoyando a sus hermanos Enrique IV y Jorge. Un año después, Warwick junto a Eduardo de Westminster murieron en las batallas de Barnet y Tewkesbury, respectivamente. Los yorkistas mataron a Enrique VI. Permitiendo que Enrique IV volviera a tener el poder. Anne, por su parte, tras morir su padre y su esposo, quedó bajo el cuidado de su cuñado, Jorge de Clarence. De alguna manera, Anne pudo escapar del control de Jorge y se casó, en 1472, con Ricardo, duque de Gloucester, con lo que éste pasó a controlar la gran fortuna de Anne. En 1473, tuvieron un hijo, al que llamaron Eduardo Plantagenet.

    Isabel, la hermana de Anne, murió en 1476 y Jorge de Clarence, fue ejecutado en 1478 por conspirar contra Enrique IV, con lo que Anne se encargó de criar a sus sobrinos huérfanos. Pasaron unos años de paz, y en 1483 Enrique IV murió repentinamente en 1483. Su hijo menor Eduardo se convirtió en Eduardo V, aunque no llegó a ser coronado, quedando a cargo de Ricardo de Gloucester, Ricardo III, que fue coronado rey de Inglaterra en junio de ese mismo año. Con posterioridad, el príncipe Eduardo V y su hermano menor fueron declarados hijos ilegítimos e indignos de ocupar el trono, por lo que fueron encerrados en la Torre de Londres y no se volvió a saber nada de ellos. Probablemente fueran asesinados por Ricardo III para afianzar su derecho al trono. Anne fue nombrada reina consorte y su hijo Eduardo príncipe de Gales, aunque Eduardo murió al año siguiente; entonces Ricardo III nombró como heredero a Eduardo, conde de Warwick, hijo de la hermana de Anne.

    Anne, que nunca había gozado de buena salud, falleció el 16 de marzo de 1485 en el Palacio de Westminster (Londres), y fue enterrada en la Abadía de Westminster.