Leonor de Trastámara, esposa de Carlos III


Escudo de armas de Leonor de Trastámara

Nació el año 1360, en Zaragoza, era hija de Enrique II de Trastámara y doña Juana Manuel, hija del poeta don Juan Manuel. Leonor pasó su infancia por distintos puntos de la península, ya que, su padre, estaba sumergido en el conflicto dinástico con su hermanastro, Pedro I de Castilla, conflicto que terminaría con la muerte de éste y la llegada de la Dinastía Trastámara. La tranquilidad familiar duró muy poco y Juana Manuel tuvo que trasladarse a Zaragoza con su hija y después al Languedoc. Cuando Enrique II de Trastámara y Juana Manuel se convertían, por fin, reyes de Castilla, Leonor fue reclamada por su padre para utilizarla en sus acuerdos políticos. Primero intentó sellar la paz con Portugal pero, definitivamente, fue casada con el heredero navarro. Tras el matrimonio entre Leonor y Carlos, éste se trasladaba a vivir a Castilla, según los acuerdos firmados entre los reyes de Castilla y Navarra. 

Tras los primeros meses de tranquilidad matrimonial, Carlos fue hecho prisionero en Normandía por el ejército francés. Fue retenido en Francia, mientras moría el padre de Leonor, en 1379 y su madre, en 1381. Cuando Carlos regresó de su reclusión, él y su mujer fueron puestos bajo la protección de Juan I, hermano de Leonor. Fueron años tranquilos en los que fueron llegando los primeros vástagos. 

En 1387 fallecía Carlos II de Navarra y Carlos heredaba el trono, y Leonor se convertía en reina de Navarra. Pero Leonor partía a Castilla, para permanecer junto a su hermano en un breve viaje que, acabaría convirtiéndose en una larga estancia de siete años. Celos y el miedo a ser envenenada por su marido, fueron algunos de los argumentos, para esta huida de siete años. 

Durante su estancia en Castilla fallecía su hermano y subía al trono el niño rey Enrique III. Entonces Leonor se volcó en el gobierno de su sobrino. En 1394, Enrique III, negoció con Carlos III la vuelta de su tía. Tras una resistencia y el intento, por parte de Leonor de no volver a Navarra, en abril de 1395 volvía de nuevo a su reino. Hasta su muerte, fue una reina respetada por su pueblo y reconciliada con su marido. En 1402 llegó un tiempo difícil para la reina, al perder a seis de sus ocho hijos. En 1413, poco después de la muerte de su hija Juana, Leonor redactaba su testamento. Falleciendo en Pamplona en 1415. 



Los datos de han obtenido de diversas fuentes impresas y publicadas en redes.

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