Pedro II, zar de Rusia (1727 a 1730)
Pedro II nació en San Petersburgo el
23 de octubre de 1715. Era hijo de Carlota Cristina de
Braunschweig-Wolfenbüttel y del zarevich Alexis Petrovitch, hijo
primogénito de Pedro el Grande.
Al morir su padre, fue encarcelado, ya que su abuelo Pedro el Grande, lo
había ignorado desde el momento de su nacimiento.
Subió al trono en 1727, al fallecer la
emperatriz Catalina I.
Durante cuyo reinado siguió siendo ignorado, hasta que, pocos años antes de la
muerte de la zarina empieza a quedar claro que el único heredero directo de
Pedro el Grande no puede estar en prisión. La mayoría de la nación y muchos
de los nobles, apoyaban el joven Pedro, mientras su tío, el emperador Carlos VI, presiona para que sea liberado a través de
embajador imperial de San Petersburgo. El problema se resuelve gracias a la intermediación
de Aleksandr Ménshikov y el conde Andréi Osterman. El 18 de mayo de 1727,
Pedro II de 12 años, según la última voluntad de Catalina I, fue proclamado zar
de Rusia. El Senado, el Consejo Privado y la Guardia, establecieron una
alianza.
La educación de joven zar fue confiada al vicecanciller, que cuidaba de Pedro en su palacio en la Isla Vasil'ievskij, y que tenía la intención de desposarlo con María, una de sus hijas; pero sus planes se vieron frustrados en el año 1727. Entonces, Pedro, fue confiado al cuidado del príncipe Vasili Dolgoruky, que lo trasladó desde San Petersburgo a Moscú. Por fin, la coronación del joven zarevich tuvo lugar en Moscú el 25 de febrero de 1728. Pocos días después, fue comprometido con la hija de su cuidador, la princesa Catalina Dologorukaya, fijándose la ceremonia para el 30 de enero de 1730. Pero el día anterior, 29 de enero de 1730, Pedro II murió de sarampión. Incluso en el lecho de muerte de Pedro, se hicieron esfuerzos para que la joven novia quedara embarazada, pero sin éxito. Fue enterrado en Catedral del Arcángel Miguel en el Kremlin de Moscú, siendo el único zar, después de Pedro el Grande, que fue sepultado en Moscú y no en la Fortaleza de Pedro y Pablo de San Petersburgo. Con la muerte de Pedro, la línea de herencia masculina de los Romanov se extingue. Por lo que la sucesora será Ana Yoánnovna (Ana I), hija del medio hermano de Pedro el Grande, el zar Iván V.
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Ramón Martín
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