Juan V el Magnánimo


   
         Nacido en Lisboa el 22 de octubre de 1689, fue proclamado rey el 1 de enero de 1707, sucediendo a su padre Pedro II. Por inexperiencia o por devoción a su padre, acentuó la política de hostilidad a España y Francia. Además de reforzar los contingentes militares, se apresuró a concertar su matrimonio con doña María Ana de Austria, hermana del emperador José I y del archiduque Carlos, pretendiente a la Corona española.

            En el terreno militar, Portugal, sólo recogió adversidades: después de varias derrotas, vio invadido el territorio nacional por los españoles; una escuadra hispano francesa se apoderaba de Río de Janeiro y amenazaba arruinar el poderío portugués en el Brasil, en 1711. Con la paz de Utrecht de 1713, y las bodas de don José, príncipe de Brasil, con doña María Ana Victoria, hija de Felipe V, y la de doña Bárbara, con el príncipe de Asturias, Fernando, en 1728. por fin se estableció la cordialidad con España.

            Juan V era un hombre de gran religiosidad, mandó construir, en agradecimiento a haberse corregido la esterilidad de la reina, el fastuoso convento de Mafra; gestionó para Lisboa una legación patriarcal y una iglesia para este patriarcado semejante en privilegios a la de San Pedro en Roma; elevó la Iglesia das Necesidades y el Hospicio de San Felipe Neri. Ese mismo celo religioso le indujo a ayudar a los venecianos en una guerra contra los turcos. Recuerdo de la gratitud de Roma por todo ello es el título de fidelísimo que ostentaba la monarquía portuguesa, poco popular siempre por los cuantiosísimos dispendios hechos para ganarlo. En contraste con estos alardes devotos está la vida íntima del Rey, era muy aficionado a aventuras galantes.

            A él se debe el acueducto das Aguas Livres, que abastece a Lisboa, el asilo de Desamparados de Caldas da Rainha, la fundación de la Academia de la Historia y la Biblioteca dela Universidad de Coimbra. Los más benévolos llegan solo a reconocer que sus desarreglos administrativos y su despotismo se deben a la influencia maléfica que sobre él tuvo el padre recoleto Gaspar de la Encarnación, verdadero rey de Portugal durante un largo periodo. Falleció en Lisboa, el 31 de julio de 1750.


Fuentes; WikipediA, Nubeluz
Imagen: Pinterest

Comentarios

Entradas populares