Joaquín Chapaprieta y Torregrosa. 148º Presidente en 1935, y 149º en 1935

Durante la Presidencia de Niceto Alcalá-Zamora de la Segunda República Española (1931-1936), decimoprimer Presidente del Consejo de Ministros, desde el 25 de septiembre al 29 de octubre de 1935, y decimosegundo desde el 29 de octubre al 14 de diciembre de 1935. 

    

Nacido en Torrevieja, el 26 de octubre de 1871 y fallecido en Madrid, el 29 de abril de 1951. Cursó Derecho en la Universidad Central de Madrid, ciudad en la que estableció, nada más licenciarse, su propio bufete, con el que llegó a adquirir gran reputación en los medios políticos y jurídicos de la capital. En el año 1901 fue elegido diputado y poco después senador por el partido político de Gasset, que luego abandonó para ingresar en la formación política de Santiago Alba. En 1903 fue nombrado Director general de Propiedades, y en 1905 subsecretario del ministerio de Gracia y Justicia, cargo que ostentó también, en dos ocasiones, en el ministerio de Hacienda, en los años 1916 y 1918. El gran salto político lo dio el 7 de diciembre del año 1922, al ser nombrado ministro de Trabajo en el gobierno formado por Manuel García Prieto.

    Durante el período de la Dictadura de Primo de Rivera, Chapaprieta se retiró temporalmente de la política activa y se dedicó por entero a su labor como jurista. Con el advenimiento de la Segunda República, el 14 de abril del año 1931, Chapaprieta fue llamado al gabinete que intentó formar Sánchez Guerra con el objetivo de aglutinar a toda la izquierda monárquica y a la derecha republicana. Ese mismo año formó, junto con Miguel Maura, el partido Derecha Republicana.

    Finalmente, obtuvo el acta de diputado por Alicante en las elecciones del año 1933, gracias al apoyo de la Unión de Derechas de Alicante, presidiendo su propio grupo político independiente. En plena etapa radicalcedista, Chapaprieta formó parte del gabinete del segundo gobierno de Alejandro Lerroux, como ministro de Hacienda, cargo que asumió el 6 de mayo del año 1935 y que le fue ratificado el 21 de septiembre del mismo año. En su breve estancia ministerial, aplicó una serie de medidas encaminadas a reorganizar la desastrosa hacienda del país, que le produjeron una cierta impopularidad en amplios sectores de la CEDA (Ley de Restricciones, conversión de la Deuda Pública, impuestos sobre la herencia y sobre la transferencia de las grandes propiedades).

    El presidente de la República, Niceto Alcalá-Zamora, al negarse a ratificar un cuarto gobierno de Alejandro Lerroux tras estallar el escándalo del estraperlo, no tuvo más remedio que encargar la formación de un nuevo gobierno a Joaquín Chapaprieta, el 21 de septiembre del año 1935, y otro el 29 de octubre del mismo año. Pero, debido a los sucesivos escándalos que iban surgiendo por doquier derivados de la crisis del estraperlo y por el caso Nombela, que estalló el 11 de diciembre del mismo año, y la cada vez más profunda división entre los cedistas y los radicales, Chapaprieta disolvió el ejecutivo.

    Alcalá-Zamora ofreció dos veces más a Chapaprieta el encargo de formar gobierno, pero éste declinó otras tantas la petición. En el primer gobierno provisional que formó Manuel Portela Valladares, el 14 de diciembre del año 1936, Chapaprieta conservó la cartera de Hacienda. Participó en las elecciones de febrero del año 1936, presentándose con su partido independiente, pero auspiciado bajo la coalición izquierdista del Frente Popular. Una vez rota la continuidad democrática con el inicio de la Guerra Civil, Chapaprieta se retiró definitivamente de la política activa. En el año 1971, de manera póstuma, se publicaron sus memorias, bajo el título de La paz fue posible.