Luis I el Piadoso, rey de Francia desde el 814 al 840

 

DINASTÍA CAROLÍNGIA

Nacimiento: 16 de abril de 778 en Chasseneuil du Poitou.

Fallecimiento: 20 de junio de 840 en Ingelheim am Rhein.

Padres: Carlos I el Grande (Carlomagno)

Reinado: Desde el 28 de enero de 814 al 20 de junio de 840.

Fue el quinto hijo del tercer matrimonio de Carlos I el Grande (Carlomagno) y de Hildegarda. En dos ocasiones fue expulsado del trono por sus hijos, aunque logró recuperarlo en ambas ocasiones. Pero estas luchas fratricidas supusieron que, a su muerte, el Imperio de Carlomagno se desintegrara.

El año 781, cuando contaba tres años, fue coronado rey de Aquitania y en el 813 fue asociado al trono por su padre, con el título de coemperador, alcanzando la plena dignidad imperial, al año siguiente, al morir Carlomagno. Desde el 781 hasta el 814 rigió Aquitania apoyado en unos consejeros que le prepararon para el gobierno durante su infancia. El 28 de enero del 814 contrajo matrimonio con Irmengarda de Hesbaye, con la que tendría tres hijos. Luis al heredar el vasto imperio Carolingio, una de sus primeras decisiones, fue colocar a los miembros de su familia al frente de las diferentes partes del Imperio. Esta decisión fue el origen de los conflictos entre sus hijos por hacerse con el poder.

En agosto del 814 nombró a sus hijos Lotario y a Pepino reyes de Baviera y Aquitania respectivamente: también nombró al hijo de su hermano Pepino, Bernardo, rey de Italia. Éste, el año 817, se sublevó contra su tío Luis I, el cual levantó un gran ejército, marchando contra él y venciéndole y sacándole los ojos; a consecuencia de lo cual murió; y Luis hizo penitencia pública en el año 822.

Reunida la Asamblea de Aquisgrán en julio del 817, Luis I confirmó a su hijo Pepino en sus posesiones de Aquitania, mientras que concedía a Luis el Germánico el reino de Baviera, que hasta entonces estaba bajo la autoridad de su primogénito, Lotario, el cual fue nombrado coemperador. Un año después, la emperatriz Irmengarda falleció y Luis contrajo matrimonio con Judith de Baviera la cual, en junio del 823, le dio un nuevo hijo, Carlos el Calvo, al que concedió, el año 829, el reino de Alemania. Lotario, contrariado, se unió a sus dos hermanos, y juntos, se alzaron contra su padre y contra Carlos, que era el favorito. El año 830 triunfaron y depusieron al emperador; aunque la Asamblea de Nijmegen, ese mismo año, restauró a Luis I en el trono.

Luis hizo un nuevo reparto del imperio, concediendo a Lotario el reino de Italia; arrebató Aquitania a Pepino y se la entregó a Carlos. Esto motivó una nueva revuelta de los tres hijos de Irmengarda, que contaron con el apoyo del papa Gregorio IV. De nuevo el emperador fue desposeído, pero en marzo del 834 logró recuperar su trono. Firmó la paz con Pepino y con Luis el Germánico, mientras Lotario volvía a sublevarse, aunque al no contar con el apoyo de sus hermanos, tuvo que retirarse a Italia.

En diciembre del 838, al fallecer Pepino, el imperio fue, de nuevo, dividido en la Asamblea de Worms del 30 de mayo del 839. Dividiéndose el imperio entre Lotario y Carlos, mientras Luis el Germánico se refugiaba en sus posesiones de Baviera, de donde partió, a finales de ese año, con su ejército, en contra de su padre, el cual convocó el 1 de julio del 840 una nueva Asamblea en Worms, pero, falleciendo antes de la celebración de esta, en Petersaue. Fue enterrado en la iglesia de San Arnulfo de Metz.

Al morir Luis I, el Imperio que había levantado Carlomagno, se estaba descomponiendo, al estar sus tres hijos supervivientes enfrentados entre sí y con las fronteras amenazadas por daneses y otros pueblos del norte de Europa. Fueron los levantamientos de bretones y gascones, y las continuas peleas contra sarracenos y normandos lo que ocasionó la decadencia del imperio de Carlomagno. Lotario, Luis el Germánico y Carlos el Calvo continuaron luchando entre ellos, mientras la obra de sus antepasados se deshacía.

Ramón Martín