Navío San Justo de España

El San Justo fue construido en Cartagena entre los años 1777 a 1779 1779 por el técnico francés Francisco Gautier. Según el marqués del Real era un navío de buen gobierno, con buen aguante a la mar y al viento, aunque no de mucho andar.

    Contaba con una Eslora de 190 pies de Burgos y 6”, la Manga era de 52 pies y 6”, un Puntal de 25 pies y 4”. En el momento de la botadura, estaba armado con 28 cañones de a 24 libras, 30 de a 18, y 16 de a 8; durante la batalla de Trafalgar, mantenía las piezas de a 24 y de a 18, aunque se le agregaron 2 más de 8, un obús de a 32 libras, 6 carronadas de a 28 y 4 obuses de a 4 libras.

    Durante la batalla de Trafalgar, tenía una dotación de 747 hombres, siendo rebajada a 610 el 3 de junio de 1806, durante su estancia en Cádiz, y vuelta a aumentar a 687, durante la captura de la escuadra de Rosilly.

    Al declararse la guerra contra Inglaterra, en 1779, rápidamente se le arma, y se nombra su comandante, al capitán de navío don Francisco Urreiztieta. Destinándole a la escuadra de Lángara que se encontraba bloqueando Gibraltar. El navío tuvo su bautismo de fuego en el combate de Santa María, efectuado entre la escuadra de Lángara y la británica de Rodney.

    En 1782 formando parte con la escuadra combinada, mandada por don Luis de Córdova tomó parte en el combate del cabo Espartel, donde contó como alférez de fragata con Alejandro Malaspina,  y el apresamiento de un gran convoy británico, siendo comandante el capitán de navío Basco Díaz de Morales y Souza. Permaneciendo con esta escuadra hasta el fin de la guerra.

    Como consecuencia del incidente de Nutka se integró el año 1790, en la escuadra del general marqués del Socorro, destino donde permanece tres años, hasta que en 1793, mandado por don José Adorno, forma parte de la escuadra de Lángara y participa en el Sitio de Tolón. El 9 de octubre de 1794 es destinado al departamento de Cartagena, y está mandado por el capitán de navío Juan de Dios Ponce de León, hasta que el 18 de junio de 1795, mandado por el también capitán de navío, don José Manuel de Villena, se le destina a la Escuadra del Océano. A finales de 1804, entro en dique.

    Al mando de Miguel Gastón, participó en la batalla de Trafalgar, siendo el navío español que menos daños sufrió en la batalla, ya que solo se contaron siete heridos.

    En 1808 fue el único navío español designado para acompañar a la escuadra francesa de Rosilly en una próxima salida de Cádiz, una vez la ocasión fuera propicia, debido al bloqueo que la Royal Navy mantenía sobre la plaza. Esto se debe a que era el único navío español en Cádiz, que estaba preparado con todo su armamento, víveres y tripulación. Situación que no se daba en el resto de la escuadra española, la cual languidecía por la falta de pagas, suministros y tripulaciones. Así, ese año, finalmente participa en la captura de la escuadra francesa de Rosilly. A continuación, entre los años 1808 y 1809, viajó a La Habana y Veracruz para traer 8 millones de pesos, al tiempo que llevaba la noticia de la declaración de guerra a Francia. Al regreso fueron 9 los millones de pesos transportados.

    Durante el sitio de Cádiz de 1810, tuvo una actuación destacada en el bombardeo de las posiciones francesas del Trocadero, pasando a continuación a Mahón. Rehabilitado en Cádiz, en 1819, tomó partido en una insurrección declarada en la Isla de León de 1820. Poco después fue arrumbado en Cartagena, donde se deshizo en 1828 por falta de carena.

Ramón Martín