Estefanía de Hohenzollern, esposa de Pedro IV
Estefanía Josefa Federica
Guillermina Antonia, nació en Krauchenwies, el 15 de julio de 1837. Era la hija
mayor del príncipe Carlos Antonio de
Hohenzollern-Sigmaringen, y su esposa, la princesa Josefina Federica de Baden. Tuvo cinco hermanos, incluyendo al que
se convertiría en el primer rey de la dinastía Hohenzollern de Rumania, Carlos I, su hermano mayor, Leopoldo, sucedió a su padre y se convirtió
en príncipe de Hohenzollern-Sigmaringen, y su hermana menor, la madre del rey
Alberto I de Bélgica, María Luisa.
Cuando Estefanía tenía once años, su
padre abdicó sus derechos al principado en nombre del rey de Prusia, y se mudó
con su familia al Palacio Jägerhof en Düsseldorf, donde creció.
Estefanía se casó con el rey Pedro
V de Portugal por poderes el 29 de abril de 1858 en la Catedral de
Santa Eduvigis de Berlín, donde el novio estuvo representado por su hermano el
príncipe Leopoldo. El 3 de mayo, Estefanía partió junto a su hermano Leopoldo hasta Ostende, donde embarcaron
hasta Plymouth, donde les esperaba la corbeta "Bartolomé Días" para
ir a su nueva patria. Llegaron al Tajo el 17 de mayo de 1858. Al día siguiente,
el 18 de mayo en la Iglesia de Santo Domingo, Estefanía se casó con el rey Pedro
V, convirtiéndose así en reina consorte de Portugal.
Pedro
V, para impresionarla, no reparó en gastos en la decoración de las habitaciones
del Estefanía en el Palacio de las Necesidades. Ordenó traer de París los muebles,
lámparas, alfombras y telas de tapicería y cortinados.
Hermosa y educada, Estefanía
escribió cartas íntimas a su madre en francés. En una, critica la alta sociedad
portuguesa: "Los portugueses tienen
el sentido de lujo y la pompa, pero no de la dignidad". Aunque
sentía anhelo de las orillas del Rin y no le gustaba el calor y la aridez de
Lisboa, Estefanía escribió que apreciaba Sintra y Mafra, aunque no soportaba la
compañía de su suegro Fernando
II.
Al poco tiempo, enfermó de difteria y
murió, el 17 de julio de 1859, a los veintidós años de edad. La enfermedad
había sido contraída durante una visita a Vendas Novas. La muerte de Estefanía
dejó muy consternado no sólo el rey, sino también el pueblo en general, que
desarrolló por ella un gran afecto. Debido a su muerte prematura, la pareja no
tuvo hijos. De hecho, la autopsia revelaría que la reina había muerto virgen. Su
cuerpo fue enterrado en el Panteón de los Braganza en el la Iglesia de San
Vicente de Fora, en Lisboa.
Fuentes; WikipediA,
Imagen:
Pinterest
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