Navío San Leandro de España

    Botado el 27 de noviembre de 1787 en Ferrol, según un proyecto de Romero Landa. El diseño es semejante a los llamados Ildefonsinos de 74 cañones, aunque reduciendo las dimensiones principales y las formas.

    En 1790 estaba mandado por Grandallana, en su viaje al Ferrol con la escuadra armada como consecuencia del incidente de Nutka.

    En mayo de 1793 realiza en corso un crucero por las Azores bajo el mando del capitán de navío don Pedro Carriazo, realizando tres apresamientos a los franceses, entre ellos la fragata Arquímedes y el bergantín Los Tres Hermanos, este último entró en Cádiz el 26 de abril al mando del alférez de navío don Domingo Agar, emprendiendo, a continuación, viaje a Cartagena para unirse a la escuadra de Lángara. Participando después en el Sitio de Tolón.

    También ese año de 1793 se da comisión a los navíos San Felipe Apóstol y San Leandro y a la fragata Rosalía para ir a la rada de Argel a buscar tres fragatas de guerra francesas procedentes de Tolón y apresarlas, pero no las pudieron encontrar.

    En 1795 represa el bergantín inglés Venus, que camino de Inglaterra había sido apresado por los franceses siendo la urca Asunción, quien la entró en La Coruña.

    En 1796 estaba en la escuadra de operaciones de Aristizábal.

    En 1805, mandado por Alcalá Galiano y acompañado del Castilla, salió de Cádiz en busca del Glorioso.

    En Trafalgar estuvo al mando de don José Quevedo, ocho de sus tripulantes murieron y veintidós fueron heridos. Por su posición el navío no pudo combatir todo lo que hubiera sido lo deseable por sus mandos, aunque logró desarbolar del velacho al Royal Sovereing gracias al afortunado disparo de una de las carronadas del navío.

    Las reparaciones de las averías sufridas en la batalla son completadas el 28 de abril de 1806, quedando de nuevo Quevedo como comandante del mismo.

    En junio de 1808 participó en el apresamiento de la escuadra francesa de Rosilly en Cádiz, y después es destinado para llevar azogues a Veracruz.

    Durante 1809 -1810 realiza trayectos entre Puerto Rico y La Habana al mando del brigadier Tomás de Ayalde y en conserva del San Ramón y un convoy de mercantes. Regresando el octubre a Cádiz con 8 millones de pesos en conserva del San Ramón y la fragata británica Undaunted. El 6 de noviembre a causa de un temporal cerca de las Bermudas se descubrió en el navío una gran vía de agua que hacían inútiles las bombas de achique. Casualmente a bordo se encontraba de transporte el brigadier ingeniero director de la Armada Honorato de Bouyon y su hijo Félix, también ingeniero, quienes desmontaron las bombas y tras limpiarlas las volvieron a montar, funcionando perfectamente y salvando así al buque de un naufragio seguro. Entró de arribada en Puerto Rico el 22 de noviembre, junto a la fragata británica, mientras que el San Ramón prosiguió su ruta. Los caudales desembarcados fueron transportados por la fragata británica y por otra de la misma nacionalidad llamada Ethalion, llegando a Cádiz el 22 de febrero de 1810. El San Leandro regresó a La Habana el 31 de mayo donde fue desarmado, siendo excluido en 1813.

Para la realización del presente artículo se ha consultado Todo a Babor y Wikipedia. Al no encontrar una imagen del navío, pongo la Corbeta Descubierta como acompañamiento del texto.