El Callista de Joan Miró

 

Realizado en 1901, es un dibujo a lápiz, tinta y acuarela de 11,6 X 17,7 cm. Se encuentra en la Fundación Miró de Barcelona.

 

Se trata de una de las primeras obras de Miró, realizada con solamente 7 años. En el plasma una escena cotidiana. Llaman la atención los pies, siendo la parte del cuerpo que se mantiene en contacto con la fuerza creadora de la tierra, como él definiría más tarde. Destacan los colores y la gran expresividad. La obra infantil de Miró es de gran importancia, puesto que él mismo dijo: "me ha costado toda la vida llegar a pintar como un niño". 

La obra de Joan Miró viene marcada por lo infantil y por su país. En los comienzos mostró influencias fauves, cubistas y expresionistas, aunque, a partir de su estancia en París, donde toma contacto con el surrealismo, se encuadra en este movimiento, volviéndose su pintura más onírica. El artista siempre tuvo un gran compromiso con su tiempo, por lo que decidió abandonar los métodos convencionales de pintura para poder encontrar una forma de expresión que fuese realmente contemporánea y definitoria de su tiempo.

Difícilmente puede pensarse en la representación artística del s. XX sin que nos venga a la cabeza el mundo mágico, colorista y onírico de Miró. Un mundo que ya se empezó a forjar en su imaginación infantil. 

Ramón Martín