José Ramón Rodil y Gayoso Campillo. 28º Presidente en 1842-1843

Tercer Presidente del Consejo de Ministros durante la regencia del general Baldomero Espartero (1841-1843), desde el 17 de junio de 1842 al 9 de mayo de 1843.

    Nacido en Santa María de Trobo (Lugo) el 5 de febrero de 1789. Cursó sus estudios en la Universidad de Santiago de Compostela, formó parte del Batallón Literario. Participó en la Guerra de la Independencia contra los franceses hasta 1814. Dos años después pasó al Perú con el Regimiento del Infante, y poco después de su llegada al Callao fue ascendido a comandante en 1817. Destacado a la ciudad de Arequipa con la misión de organizar un batallón, se trasladó con sus reclutas a la pequeña isla del Alacrán, frente al puerto de Arica. Luego de un riguroso entrenamiento, al frente de ellos marchó a reforzar las unidades realistas que guarnecían Chile. Participó en los combates de Talca, Cancha Rayada y Maipú. Al retornar a Lima fue ascendido a coronel en 1820 y destinado a las fuerzas acantonadas en el Callao.

    El desastre de Ayacucho en 1824 puso fin al virreinato peruano, sin embargo, Rodil, entonces comandante militar de las fortalezas del Callao, se negó a acogerse a la capitulación confiando en recibir refuerzos de España. Asediado por tierra y por mar, en la Fortaleza del Real Felipe y los Castillos del puerto resistió durante dos años, la defensa la realizó con los regimientos: Real de Lima y Arequipa, junto a algunos soldados independentistas desertores que se le habían unido. En El Callao estaban refugiados millares de civiles que perecieron en gran número. Finalmente, el 22 de enero de 1826 debido a las numerosas bajas y a que los sobrevivientes se alimentaban de ratas Rodil aceptó capitular ante el general venezolano Bartolomé Salom. La resistencia del jefe realista mereció que Simón Bolívar dijera a Salom, cuando este último pedía la máxima pena para Rodil: “El heroísmo no es digno de castigo”. Obtiene condiciones honrosas en la capitulación llevando consigo las banderas de sus regimientos que fueron las últimas en abandonar el Perú. Con la entrega del Callao, desapareció el último ejército español de América del Sur. Regresó a la península en 1826 como Mariscal de Campo por haber defendido heroicamente El Callao, y por sus méritos militares se le otorgó en 1831 el título nobiliario de marqués de Rodil.

    A la muerte de Fernando VII en 1833, durante la Primera Guerra Carlista, Rodil, combatió en el ejército de la regente María Cristina, recibiendo la misión de capturar al pretendiente al trono, Carlos María Isidro, que estaba refugiado en Portugal; con la ayuda inglesa el pretendiente consiguió huir. Más tarde Rodil fue nombrado general en jefe del Ejército del Norte, con la misma misión: capturar a Carlos María. Pero el ejército cristino fue vencido por Zumalacárregui, lo que provocó la destitución de Rodil. En 1936 fue nombrado Ministro de Guerra, cargo que desempeñaría en dos ocasiones más y a lo largo de su carrera fue nombrado capitán general de Aragón, Castilla la Nueva, Extremadura y Vascongadas.

    José Ramón Rodil fue además inspector general del Cuerpo de Carabineros, que organizó con una estructura enteramente militar y que colocó bajo la dependencia del ministerio de Guerra. Desempeñó también los cargos de inspector general de Milicias Provinciales, comandante general de la Guardia Real y de Alabarderos. En cuanto a su carrera política, fue diputado y senador en diversas etapas y en mayo de 1842 fue nombrado presidente del Consejo de Ministros. Durante su gobierno, que se prolongó hasta marzo de 1843, logró consolidar su proyecto para el Cuerpo de Carabineros, bajo la dirección del mariscal de campo Martín José de Iriarte. Acabó distanciándose de Espartero, lo que supuso su desaparición de la vida política. Falleciendo en Madrid el 20 de febrero de 1853.

Ramón Martín